Ecologistas de Almería advierten que la promoción de coches eléctricos «traslada a los pueblos la contaminación de las ciudades». Denuncian que la electricidad que utilizarán esos vehículos en España se genera mayoritariamente a partir de energías fósiles en centrales térmicas como la de Carboneras.
La Coordinadora Ecologista Almeriense ha denunciado ante las administraciones competentes «el engaño que están promoviendo con los coches eléctricos. Ya que es totalmente falso que contaminan poco o peor todavía que no contaminan».
«La verdad -dicen los verdes en una nota de prensa- es muy distinta y muy clara. Lo que pretenden es trasladar el foco contaminante desde las ciudades a los pueblos que tienen las centrales térmicas que producen la electricidad».
En su escrito, el grupo ecologista explica que «la electricidad que toman los coches eléctricos al recargarse en una ciudad la cogen de la fabricada en una central generadora que necesita quemar un combustible fósil para ello, de forma similar a como lo hace el propio vehículo para producir la energía que necesita para rodar. Si hablamos de nucleares el problema es mayor, (de la contaminación radiactiva no vamos a hablar ahora, ya que es de sobra conocida). Y si hablamos de la producción de electricidad verde, proveniente de presas hidráulicas, aerogeneradores o fotovoltaica, hay que señalar que en nuestro país está muy poco desarrollada por la presión de las grandes eléctricas y petroleras. O sea, que vamos a desvestir a un santo para vestir a otro».
A todo esto, según asegura la coordinadora conservacionista, «hay que añadir la baja eficiencia energética del proceso, pues primero hay que producir la electricidad, con la eficiencia determinada que tenga el proceso correspondiente, que nunca es del 100%, después hay que trasladarla, con la consiguiente pérdida, y por último al producir el movimiento del vehículo vuelve a haber una merma de eficiencia».
«Lo que ocurre realmente con la saturación de vehículos de las grandes ciudades (y de las menos grandes) es la gran incapacidad (con la consiguiente irresponsabilidad que ello conlleva) de nuestros políticos y políticas para hacer frente a este problema. Pues los planes de transporte público los tienen muy mal planificados y son muy poco efectivos como se está viendo. Y es aquí donde radica una gran parte de la solución de este grave problema, en establecer un eficiente plan de movilidad urbana, basado en la promoción, racionalización y subvención de los transportes públicos, educar y concienciar a la población y que los ayuntamientos se impliquen más y mejor a como lo vienen haciendo hasta ahora».
«Asimismo -concluyen-, la Coordinadora Ecologista Almeriense en su denuncia a las administraciones competentes, tanto de la Junta de Andalucía como del Gobierno del Estado, pide que favorezcan el desarrollo de procesos de generación de electricidad menos (o nada) agresivos con el Medio Ambiente, ya que, hasta ahora, han hecho todo lo contrario, evidenciándose la presión de las eléctricas»