La Coordinadora Ecologista de Almeriense junto a las asociaciones Salvemos Mojácar y el Levante Almeriense, Grupo Ecologista Cóndor, Ecologistas en Acción Almanzora-Levante, Grupo Ecologista Rakis y Asociación de Vecinos Bastetania, han presentado alegaciones contra el dictamen ambiental por el que la Junta de Andalucía está en trámite de dar luz verde a la macro-urbanización de 1.600 viviendas que cubrirá de hormigón el único litoral libre que queda en el Levante almeriense: los 3 kilómetros de la playa de Palomares.
Este dictamen es un paso previo a la Autorización Ambiental Unificada. Las organizaciones exigen que sea revisado y que se dicte una resolución desfavorable.
Ante todo las organizaciones consideran que la urbanización es un atentado ecológico inaceptable que va a degradar los únicos 3 kilómetros que quedan sin urbanizar en la zona, siendo imperativo evitar nuevas presiones sobre una zona tan ambientalmente sensible y degradada como el litoral; careciéndose totalmente de justificación para este macro-desarrollo totalmente contrario a la ley que creará un enorme núcleo de la nada, triplicando la población de Palomares, y sin demanda ni argumento que lo justifique; máxime en pleno auge del colapso climático, la subida del nivel del mar y la inundaciones masivas, a las que la zona es particularmente sensible.
Denuncian que un vez más la Junta de Andalucía ignora sus propios informes pues contradice al Plan de Protección del Corredor Litoral de Andalucía que, en el diagnostico que hace sobre este Plan Parcial, expresa claramente las razones por las que no debe de llevarse a cabo: “Constituye el último espacio libre de procesos de urbanización al sur de la desembocadura del río Almanzora hasta el LIC Sierra Cabrera-Bédar, por lo que su urbanización incrementaría la presión sobre una costa a punto de conurbación, al tiempo que se podría agravar los procesos erosivos que presenta el frente costero. Destaca la presencia de comunidades vegetales de interés integradas en amplias zonas de matorral y uno de los pocos Bosques Islas de litoral almeriense identificados por estudios oficiales. Es colindante con espacios protegidos por la legislación ambiental (LIC, ZEPIM).”
Junto a esto se ignora que es una zona inundable además de sujeta a regresión de la línea de costa por el Cambio Climático.
Y por si fuera poco se ignora el principio de precaución ante la proximidad de los colindantes terrenos contaminados radioactivamente
por las bombas de Palomares y los riesgos de hacer obras masivas en suelos tan extensos que pudieran desenterrar partículas radioactivas y diseminarlas en el entorno, riesgo que las organizaciones denunciantes no consideran se haya eliminado, ni la ausencia de dichos riesgos se justifique suficientemente en los informes mencionados en el Dictamen. De hecho la normativa que se aplica en Palomares como umbral tolerable de radiación es mucho más alta de lo normal con 20 mili Sievert (mSv) allí donde normalmente ha de ser 1 mSv al año. Esto equivale a 200 radiografías por persona por año. Además en la playa de Quitapellejos se lavaban los coches usados en la época para la limpieza inicial de la zona más contaminada, por lo que es altamente probable que haya contaminación enterrada y sin cuantificar, precisamente en los enormes suelos sujetos a urbanización salvaje en este proyecto.
Entre otros puntos denuncian que el dictamen es técnicamente débil y jurídicamente cuestionable, porque, entre otras cuestiones:
- Reconoce valores ecológicos pero los minimiza sin base técnica.
- No integra los nuevos principios de sostenibilidad y cambio climático de la LISTA ni de la Ley 7/2021.
- Desestima alegaciones relevantes sin motivación suficiente.
- Carece de evaluación acumulativa e hidrológica completa.
Por tanto consideran que existen fundamentos sólidos para solicitar revisión y/o nulidad del dictamen y de la Resolución de Autorización Ambiental Unificada que de él se derivara, así como suspensión cautelar de cualquier actuación derivada de esta debido a:
- Afección ambiental: insuficiente valoración de hábitats, Red Natura y fauna.
- Deficiencias formales: omisión de informes, falta de motivación y respuesta a alegaciones.
- Riesgos para la salud: se ignora el principio de precaución ante la contaminación radioactiva.
- Incompatibilidad territorial: ausencia de justificación de demanda, vulneración de la LISTA y del principio de sostenibilidad.
Por ello solicitan la revisión integral del Dictamen Ambiental del expediente AAU/AL/0023/21, y la emisión de un nuevo informe que evalúe adecuadamente las afecciones ambientales descritas; y que, a la vista de dichas deficiencias, se formule declaración ambiental desfavorable al ‘Proyecto de urbanización del sector PA-4 Palomares’.
Anuncian movilizaciones y recursos legales si la Junta de Andalucía sigue adelante con la aprobación de esta aberración, que es tanto más inaceptable en tiempos de emergencia climática y dada la nula justificación, siendo un proyecto puramente especulativo de empresas depredadoras que llevan años explotando la comarca, asociadas a macro-urbanizaciones como Desert Springs con su aberrante modelo de campo de golf en el desierto.
La playa de Palomares debe seguir sin urbanizar a fin de mitigar efectos desastrosos de erosión de la costa y los ecosistemas por la creciente presión antrópica allí donde esta debe reducirse al mínimo, ante una emergencia climático-ecológica que a tenor de los informes de la ONU plantea un escenario incompatible con la vida humana y de millones de especies para finales de este siglo.