La Coordinadora Ecologista Almeriense ha presentado sus alegaciones al POTPA (Plan de Ordenación del Territorio del Poniente Almeriense).
Señalando los siguientes términos. Cualquier Plan de este tipo ha de tener una evaluación continua que vaya comprobando el correcto desarrollo del mismo, y para detectar desviaciones para aplicarles las correcciones correspondientes. Por lo que si ya han transcurrido 22 años es un periodo bastante largo para no haber realizado evaluaciones periódicas (si las ha habido no las conocemos).
Sobre las actuaciones previstas en el POTPA actual y no cumplidas, total o parcialmente, hemos de destacar:
- Los problemas con el agua. Insistiendo en la insostenibilidad hídrica del modelo de desarrollo territorial dada la insuficiencia de recursos naturales disponibles. Donde no se ha actuado, pues partiendo de los acuíferos sobreexplotados se ha estado, y se sigue, permitiendo la ampliación de nuevos regadíos. Problema más que evidente aunque haya algunos que cegados por un incontenible afán de lucro no llegan más allá. Por lo que instamos a esta Consejería que sea firme ante estos intereses bastardos que solo piensan en ellos, aquí y ahora. Es inadmisible, de todas las maneras el incremento señalado de 1.888 hectáreas de más invernaderos.
Insuficiente aprovechamiento de recursos no convencionales.
Déficit en infraestructuras de captación, regulación e interconexión.
Gestión ineficiente de los recursos en determinados ámbitos.
Baja eficiencia de los sistemas de distribución.
Existencia de aprovechamientos irregulares.
La mala calidad del agua es responsable de importantes afecciones sobre el medio acuático, pero también ocasiona restricciones significativas a la utilización de estos recursos en la satisfacción de las demandas, especialmente las de abastecimiento urbano, que son las que mayores exigencias requieren a este respecto para su servicio.
El mayor problema de los acuíferos es el de la intrusión marina por el incremento de diferencial de presión con respecto al medio marino, debido a que el volumen de extracciones supera la recarga del sistema. Este problema es más evidente en la costa de Balerma y en la costa de Aguadulce, reduciéndose en las cercanías de la Sierra de Gádor.
Teniendo en cuenta que el generador más importante de contaminación por nitratos y compuestos fosforados es el sector agrario, y fundamentalmente el regadío, mientras que la principal fuente de contaminación biológica es la actividad urbana, como consecuencia del vertido de sus aguas residuales a los cauces. Necesitamos los datos de la situación actual y la de hace 22 años de estos escenarios.
- Los problemas con los residuos vegetales siguen sin solucionarse, las instalaciones existentes no tienen posibilidad de acoger en tan poco tiempo todo el volumen de restos vegetales que se genera. Por lo que se sigue utilizando la quema de estos residuos como forma de eliminarlos, con la consiguiente contaminación que conlleva. Cabe señalar aquí que plantas de quema de residuos que aparecen como la solución del problema lo que pretenden, verdaderamente, es montar una central térmica cuyo combustible sería estos residuos. El POTPA debe contemplar la prohibición de cualquier sistema de eliminación de residuos (de todo tipo) que se basen en la incineración. Los procesos de combustión, cualquiera que sea el material utilizado, conlleva la emisión a la atmosfera de una serie de gases altamente contaminantes como puedan ser monóxido de carbono, dióxido de carbono, azufre, etc. Pero en este caso la situación es extremadamente más grave ya que cuando en el proceso de combustión el combustible que utilizamos posee una serie de productos químicos como venenos, plaguicidas, fungicidas, etc…, a los gases contaminantes procedentes de cualquier proceso de combustión hemos de unirle los gases resultantes de quemar estos productos químicos, que además resultan altamente tóxicos para la salud, agravándose más aun al entrar en el proceso restos de plásticos y rafias.
- Los problemas con los envases de productos fitosanitarios, residuos plásticos y otros, siguen sin solucionarse, constituyendo un problema de salud pública de primer orden.
Hay que sumar otros residuos, también están sin resolver, como: sustratos usados (lana de roca, perlita, fibra de coco), maderas (pallets, rollizos de invernaderos,..), cartón y papel, chatarra metálica, mantas térmicas, gomas de goteo, etc. Los envases de producto fitosanitarios generados dependen del tipo de cultivo, del tipo de plaga o enfermedad, y del tipo de presentación comercial. Se estima que se generan en el Poniente Almeriense unos 3 millones de envases/año, fundamentalmente de plástico y también de metal, aunque en algunos casos se utiliza vidrio o papel. En cuanto al destino de estos envases una vez utilizados, la mayoría de los productores, aproximadamente el 70%, los devuelven al almacén o los depositan en contenedores apropiados, un 15% son depositados en vertederos, mientras que el otro 15% se abandona, o los tiran con otros residuos, quedando sin gestionar de manera conveniente. Otro problema de máxima actualidad, y que es urgente resolver, es el de los residuos plásticos de los invernaderos. En ese sentido, la Oficina del Defensor del Pueblo Andaluz abrió, a principios de 2019, una queja de oficio para conocer el estado en que se encuentra la campana de retirada de plásticos de uso agrícola, que la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural anuncio en julio de 2018. En el texto se apunta que la Defensoría ha conocido a través de los medios de comunicación la problemática suscitada en algunas zonas de Andalucía, singularmente en el Poniente Almeriense, con motivo del abandono de plásticos de uso agrícola, especialmente de invernaderos, en espacios donde generan una gran contaminación y redundan muy negativamente en el entorno, por ser materiales de alta durabilidad y de gran impacto en el medio ambiente.
- Los problemas de contaminación por el uso de fertilizantes y de plaguicidas siguen sin solucionarse. El uso poco controlado de los fertilizantes está provocando la salinización del suelo y la contaminación de las aguas por iones nitrogenados y fosfatados. En la actualidad los suelos de invernadero están sufriendo un proceso de degradación en sus características fisicoquímicas y en la acumulación de metales pesados. El Poniente Almeriense es la comarca con mayor volumen de uso de plaguicidas, manteniéndose una tendencia creciente desde los años 90. El uso excesivo de plaguicidas conlleva unos riesgos medioambientales en materia de: contaminación del agua, contaminación del suelo, y la presencia de fitosanitarios en los productos agrarios, los restos vegetales, en los plásticos de invernaderos y en los envases de productos fitosanitarios. Con la consiguiente repercusión en la salud humana.
Asimismo queremos añadir las siguientes consideraciones que no se han desarrollado en estos 22 años:
- Consideramos que existen, todavía suficiente superficie en los llanos como para que toda la zona de piedemonte de la Sierra de Gádor sea liberada de las tareas agrícolas, restaurada y restituida a su situación inicial. Que se aclare más y mejor su situación no invernable.
- Consideramos necesario apostar por la consolidación de los núcleos urbanos históricos frente al diseminado, constituido en gran parte por infraviviendas ocupadas por trabajadores inmigrantes. Fomento de transporte público y los medios alternativos.
- Garantía en el tratamiento de aguas residuales en todos los núcleos, con terciario, para reutilización de las aguas depuradas para el riego.
- Tener en consideración que la zona es sísmica y con riego de inundaciones.
- El espacio turístico se considera saturado, por lo que no se deben de proponer nuevos desarrollos.
- Consideramos que no se deben de potenciar como zonas libres de ocio y recreativas los Parajes ni Reservas, pues con las limitaciones de usos y actividades que sobre los mismos señalan sus PORN no van a permitir los usos que se prevén en este POT. Pues sólo está justificada su inclusión para suplir el déficit de otros espacios libres. Por tanto se deberían suprimir los usos recreativos blandos en los … espacios naturales protegidos y los itinerarios de interés ecológico y recreativo. Por compartir el mismo valor ecológico, proponemos extender lo señalado a las playas de estas zonas protegidas (Albuferas de Adra y Punta Entinas-Sabinar). Y por tanto no se favorezca su acceso ni se doten de zonas de aparcamiento próximas. Estas zonas, de alto valor ecológico, están sufriendo ya una considerable influencia antrópica que se está aumentando sufriendo procesos de degradación irreversibles. Proponemos crear parques urbanos interiores en las zonas más libres. No “aprovechar” estas zonas naturales de gran valor medioambiental, ecológico y científico.
- La planificación de Parques Comarcales de este POTPA la consideramos muy insuficiente. Proponemos añadir más parques comarcales y más próximos a los núcleos de población (que por su proximidad al núcleo urbano no se necesiten medios de transporte para su uso y disfrute): Adra, zona Puente del Río-Venta Nueva, Berja, Dalías, El Ejido (norte), Santa María del Águila, Bala Negra-Balerma, Las Norias, La Mojonera, Puebla de Vícar, La Gangosa y Aguadulce.
- Hacer hincapié en la restauración de las canteras de áridos abandonadas y en los desmontes ilegales, algunos de ellos de enorme impacto ambiental y paisajístico.
- Urge la preservación de las zonas de Artales. Y restauración de las degradadas y deterioradas.
- Hay que señalar la presión que está sufriendo, por ocupación con invernaderos, el LIC Artos de El Ejido. La importancia de este lugar es debida a la presencia de Hábitats de Interés Comunitario de Matorrales Espiniscentes de Ziziphus Lotus, como ejemplo de hábitat primigenio que se extendía sobre el Campo de Dalias, actualmente relegado a varias manchas entre invernaderos y edificaciones. En la actualidad, la delimitación existente se encuentra en vigor, aunque se está tramitando una descatalogación parcial de este ámbito con valores ambientales en base a la Sentencia del TSJA sobre la delimitación contemplada en el POTPA vigente.
- Consideramos que las zonas protegidas, en su conjunto deberían de mantener algún nexo que las relacione entre sí para evitar el efecto isla.
- Ante el elevado aumento de la red viaria proponemos que se tengan en cuentan criterios de minimización del impacto en el entorno. Principalmente con la revegetación de los taludes y arbolado de los arcenes.
- En los objetivos (normativa) sobre el Sistema de Espacios Libres se habla mucho de facilitar, animar, … a la gente al uso y disfrute de los espacios naturales. Aspecto que, de principio, nos parece bien, pero hacemos la consideración de que existe poca conciencia medioambiental en la población, con lo cual al acercarla más a estas zonas naturales vamos a favorecer, también su degradación. Por lo que echamos en falta la planificación de acciones encaminadas a aumentar el respeto, por parte de la población, hacia estos espacios.
- Y por último, y quizás más importante, consideramos que este Plan debería incluir otros sistemas de mejoras sociales, ya que hay un grave problema de convivencia. Y es que hay muchos agricultores (y no solo en esta Comarca, también en el Levante) que no se conforman con ganar un buen dinero y vivir bien, pues se están haciendo millonarios a costa de la degradación del medio ambiente y de la explotación de los inmigrantes. Y ya va siendo hora de que se le vaya metiendo mano a este gran problema.